Me levantaba a las 5 de la mañana y terminaba a las 7 de la noche porque eran 14 horas de trabajo. Mi salario era por debajo de los 1'40 peniques.
Vivía en un barrio muy pobre junto a las fabricas, las casas eran de madera. En verano hacia mucho calor y en invierno mucha gente moría de frió.
Comíamos harina, y poco mas, todo el rato trabajábamos.
En la familia estaban hermanos, padre, madre, abuelos, a los abuelos no los dejaban trabajar.
Trabajábamos en los telares de las fabricas juntos.
Se sentian muy mal porque el trabajo era muy dificil.